lunes, 4 de febrero de 2008

La vida es la historia más bonita que podemos contar


Con este lema se conmemorará el 15 de Febrero el Día internacional del Niño con Cáncer. Ellos, los niños y niñas enfermos de cáncer aman la vida, saben lo valiosa que es, lo que les cuesta, lo frágil que puede llegar a ser y lo difícil que nos resulta a veces sostenerla.
No está de más que valoremos el aire que respiramos todos los días, el olor a café y tostadas de por las mañanas, el sabor de la comida, el susurro de la gente por la calle al despertarte, el saludo de tu vecino, el frío de un cálido invierno, el cariño de tu familia, simplemente, el color de tu vida.


Mis padres son los padres de cualquier adolescente que durante meses lucharon a capa y espada contra la enfermedad del cáncer que su hija padecía. Como muchos otros, nunca pensaron como posible lo que les iba a suceder, sin embargo, tras una dura lucha hoy lo cuentan como la experiencia de su vida, aquella que los transformó y que les hace transmitirnos a través de una sincera sonrisa lo bello y bonito que es vivir.

1ª ¿Cómo afrontaron la situación?

Como un auténtico mazazo. Nuestro desconocimiento de una enfermedad tan grave unido al hecho de que ya había sido diagnosticado como algo muy leve, nos produjo un gran desconcierto, inseguridad y amargura.

2ª ¿Cuál fue la actitud que decidieron adoptar al ver lo que se avecinaba y cuál fue la que mostraban ante su hija?

Tranquilidad, serenidad, paciencia y esperanza, tratando de transmitir estos sentimientos a nuestra hija, de manera que no se sintiera insegura, desprotegida y sobre todo que no pensara en ningún momento que su enfermedad podía ser terminal.

3ª ¿Cuál fue el impacto que originó el cáncer en su familia?

De una gran preocupación y como no, de unidad para afrontar todos juntos esta terrible enfermedad, poniendo la determinación y todo el esfuerzo posible para superar este problema.

4ª ¿Cómo se adaptaron emocionalmente a esta situación?

Al principio muy mal, pero nuestra gran desesperación se fue transformando en una gran esperanza, a medida que íbamos conociendo las posibilidades de curación sabiendo también, que esta enfermedad no es invencible, sino que cada vez, es mayor el porcentaje de enfermos que la superan, y mayor los avances que en este sentido consigue la medicina.

5ª ¿Conoció en todo momento su hija la verdad de su diagnóstico?

Sí. Únicamente al principio, le quitamos importancia a la gravedad del diagnostico, para ayudarle psicológicamente, aunque ni nosotros conocíamos la gravedad del tumor. De hecho, creíamos que era mucho mas grave de lo que le transmitíamos.
Afortunadamente, lo que al principio era una mentira piadosa quitándole importancia al cáncer que padecía (monstruito como así lo llamamos), los análisis posteriores, confirmaron que a pesar de su tamaño, no era de los más agresivos y por tanto, la información que le habíamos transmitido coincidió con el diagnóstico final.

6ª ¿Cómo afecto psicológicamente, a la paciente, la enfermedad?

Psicológicamente tuvo sus momentos bajos, pero la mayor parte del tiempo, se comportó con una gran madurez, serenidad y optimismo, que a nosotros nos sorprendió gratamente y nos animó mucho.
No necesitó mucho apoyo y ayuda psicológica, ni la pidió, más bien ella la daba a los demás.
Como única excepción, mostró una significativa preocupación por el aspecto externo de su pierna, después de sufrir una gran operación que extirpó el tumor y parte de sus músculos. Lógico, teniendo en cuenta su edad. En general su actitud fue de sobresaliente.

7ª ¿Podría decirse que la actitud del enfermo y sus familiares influye en el desarrollo de la enfermedad?

Para nosotros, sin lugar a dudas. Una actitud de superación de la enfermedad unida a nuestras fuertes creencias (fe). Estamos convencidos que contribuyen positivamente a la curación de la enfermedad, así es.

8ª ¿Creen que no hay mejor alivio y muestra de superación que el testimonio de quien ha pasado por ello y anima a otras a seguir sus pasos?

Indudablemente, las personas que han pasado por este trance son las más adecuadas para, a través de su experiencia, animar a los pacientes con esta enfermedad a superarlo.
Pero hay otras personas, que con su profesionalidad y experiencia continuada, tratando a pacientes con estas enfermedades, son los más cualificados para animar al enfermo a superar esta traumática enfermedad. Como hicieron con nuestra hija todos los profesionales que trabajan en el departamento de oncología, dispensándonos a todos un trato muy humano y profesional.

9ª ¿De qué manera pueden ayudar los familiares y amigos a una persona que padece cáncer?

Pues dando mucho cariño, mucho apoyo moral y psicológico y sobre todo, animar al enfermo a luchar contra la enfermedad, a derrotarla y superarla.

10ª ¿Qué ha sido lo más duro?

Lo más duro fue conocer el diagnóstico inicial, que confirmaba que el tumor era maligno.
Como decíamos anteriormente nuestro desconocimiento de esta enfermedad y su mala prensa, nos supuso un terrible desconcierto y una desgracia enorme.

11ª Y dentro de lo peor, ¿qué fue lo mejor?

La superación de la operación y el diagnóstico final tras el análisis del tumor, que confirmaba que había un final esperanzador y una recuperación en el tiempo.

12ª Una experiencia de este tipo, ¿qué les aporta?

“Lo que no te mata, te hace más fuerte”. Te aporta ver esta vida con otra perspectiva, ver lo fugaces y débiles que somos, saber la importancia de cuidar nuestro cuerpo y someterlo a las mínimas agresiones posibles.
Que los problemas cotidianos no son nada, que lo más importante es nuestra salud y tener una familia y amigos con los que compartir lo bueno y superar lo malo.

13ª ¿Qué les dirían a todos esos enfermos de cáncer y a sus familias que siguen luchando por su vida?

Primero, que no es una enfermedad maldita o incurable. Afortunadamente, hoy todos los canceres tienen tratamiento y la mayoría de ellos se curan y los que no, los avances de la medicina actual prolongan tanto su vida que mañana podrán curarse. Que tengan fe y esperanza, y que todos unidos, con seguridad superarán esa situación.

El cáncer infantil representa del 1% al 3% de los cánceres humanos, pero ocupa el segundo lugar en causa de muerte de niños de 1 a 14 años, superado sólo por accidentes e intoxicaciones. Sin embargo, esta patología se presenta con localizaciones anatómicas profundas, lo que hace imposible la utilización de técnicas de detección precoz, a diferencia de los adultos.
La edad de mayor incidencia se sitúa entre el primero y el cuarto año de vida, lo que significa 120 nuevos casos anuales por cada millón de niños menores de 15 años. En España, los casos han ido aumentando en un 5% cada 5 años; uno de cada 440 niños y una de cada 590 niñas. Las tasas de supervivencia cinco años después del diagnóstico están en torno al 70%, gracias a la mejora de los tratamientos.

3 comentarios:

vto dijo...

Buenos días Zaid,

Me alegro de ver que estás recuperada, después de los comentarios en mi blog no sabía en que estadio de la enfermedad te encontrabas.
Me imagino aquellos tiempos, las incertidumbres, más aún con 25 años y toda la vida por delante, yo tengo 44 y una hija de 4 años, espero tener mucha vida por delante, lo deseo, y cuando tengo los ratos flojos trato de pensar en las personas como tu que han salido adelante y han empezado una nueva vida.
Bueno, el lado positivo de todo esto es que vivirás una vida mucho más plena que la de la mayoría de la gente, aprendemos a vivir día a día a distinguir las cosas superfluas de las importantes, vas a disfrutar de tu vida traiga lo que traiga, estoy seguro.
Gracias por el apoyo, ahora lo necesito más que nunca.
Un abrazo,

Víctor Romero
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vto-luchandocontraelcancer.blogspot.com

vto dijo...

Queremos más, lentuza.

Un abrazo,

Vto

vto dijo...

Hola Zaid,

Ya hace mucho tiempo que no tenemos noticias tuyas, ¿está todo bien?.

He dudado mucho y durante mucho tiempo sobre poner este comentario, espero no molestar a nadie.

Un abrazo,

Víctor